Tarima flotante, el suelo más acogedor
Si estás cansado o aburrido del suelo que tienes en casa, pero te horroriza la idea de meterte en obras, tienes una solución rápida, económica, y que hará de tu casa un lugar mucho más acogedor.
La tarima flotante es un material que se instala fácilmente, no va pegado ni clavado a la solería antigua. Por lo que la instalación es muy sencilla y no supone mucha suciedad en casa. Es un material sintético que se instala uniendo las piezas mediante un click o machihembrado, y que lleva debajo un aislante. Se puede expandir o dilatar dependiendo de la temperatura y la humedad que haga.
Lleva una junta perimetral que deja holgura para que se dilate y contraiga, y debajo de las puertas en las que haya tarima flotante suele ponerse la junta de transición, que tiene la misma función, así no se forman bolsas ni se levantan las lamas de tarima.
El mantenimiento de este tipo de suelos es muy sencillo, lo más práctico es pasar una mopa para mantenerlo limpio, y cada 4 o 5 días puede pasarse una fregona que esté bien escurrida, no es recomendable echarle agua en abundancia porque con el tiempo puede dañar el material y hacer que se noten más los bordes de las lamas.
Si estáis interesados en ver el producto, podéis pasar por nuestras instalaciones, y le realizaremos presupuesto sin compromiso, tenemos variedad de fabricantes, y muchas terminaciones y colores diferentes, seguro que cuando los veas ¡¡ te enamoras!! 952 34 38 00